¿Cómo planificar los bancales de cultivo de tu huerto?

La planificación de lo que vas a plantar en los bancales de tu huerto urbano no es algo que debas hacer a la ligera, ya que aunque es algo sencillo te juegas el éxito en tu cosecha.  Los siguientes consejos básicos que te proponemos te guiarán a la hora de planificar los cultivos de tus bancales además de facilitar su manejo en este año y en los posteriores. ¡Toma nota! Ah, y recuerda que tenemos un taller en un par de días.

Pasos a seguir para planificar tus bancales

  1. Apunta las condiciones ambientales básicas de los bancales de tu huerto:
    • Horas de sol directo.
    • Profundidad de los bancales.
  2. Haz una lista de los cultivos que quieres tener en tu huerto.
  3. Estudia cada una de las especies elegidas, teniendo en cuenta esencialmente:
    • Horas de luz necesarias.
    • Profundidad necesaria para el desarrollo completo de sus raíces.
    • Marco de cultivo.
    • Asociaciones de cultivo, teniendo en cuenta sobre todo las asociaciones desfavorables para no llevarnos sorpresas desagradables.
  4. Siguiendo esta lista, sé realista con las especies que has elegido y decide si debes cambiarlas por otras que se adapten mejor a las condiciones de tu huerto —¡y que vayas a aprovechar también, por supuesto!—.  Por ejemplo, si la profundidad de tus bancales es de 25 cm en total, y quieres plantar una tomatera de tomates gordos, no obtendrás una buena cosecha al no disponer la planta de todo el volumen de tierra que necesita. Por eso estudia el cambiar de variedad de tomate a una de cherry o cambiar a otra especie que se adapte mejor a las condiciones de tu huerto para asegurarte una cosecha abundante. Si tienes la posibilidad, puedes hacer bancales de diferentes alturas, así no tendrás problemas de volumen.
  5. De las especies seleccionadas finalmente, agrúpalas por asociaciones de cultivo y elige el cultivo principal de cada bancal. Por ejemplo, si tienes la asociación col-lechuga, el cultivo principal sería la col, ya que es la que se llevará la mayoría de los recursos en cuanto a insolación y nutrientes.

Puntos claves en el momento de la plantación de los bancales

A la hora de la plantación, ten en cuenta estos puntos que te ayudarán a aprovechar mejor el espacio y a tener un huerto más productivo:

  • Orientación de las plantas.
  • Plantar de manera escalonada.
  • Respetar el marco de cultivo de cada especie.
  • Planificar una rotación de cultivos.

A continuación, entramos en detalle:

Orientación de las plantas

Orienta las plantas según la orientación de tu huerto: Para esto deberás tener en cuenta las plantas que necesitan más horas de sol o menos. Veamos un ejemplo:

Si vamos a plantar tomates y cebollas, ambos muy amantes del sol, deberemos de plantar las cebollas de manera que los tomates no les quiten el sol que tanto les gusta. Para esto colocaremos las cebollas delante de los tomates con respecto a la insolación del sol.

Plantar de manera escalonada

Para conseguir una cosecha constante de lechugas por ejemplo, no plantes la totalidad de las lechugas de golpe, ya que madurarán todas al mismo tiempo y no darás abasto para comerlas. Lo que debes de hacer es plantar dos de primeras (o según la cantidad de lechugas que consumáis en casa), y en 10-15 días plantar otras dos, y así sucesivamente. De esta manera cada 10-15 días tendrás lechugas nuevas que cosechar, en definitiva, planta de forma escalonada según necesidad.

Respetar el marco de cultivo de cada especie

Esto es imprescindible para el correcto desarrollo de cada planta. El marco del cultivo es el espacio vital que necesita cada planta para su completo desarrollo. Por lo tanto es imprescindible respetarlo para que no encuentre déficits de nutrientes o espacio entre otros factores.

.

Planificar una rotación de cultivos

Si tienes varios bancales, pon una asociación o dos como máximo por bancal y cada temporada realiza una rotación de cultivos para evitar el agotamiento de la tierra. La rotación la hacemos basándonos en los nutrientes más usados por los cultivos plantados:

  • N, Nitrógeno: Hortalizas de hoja. Compuestas como lechugas y Quenopodiáceas como acelgas o espinacas.
  • P, Fósforo: Hortalizas de fruto. Solanáceas como tomates, berenjenas o pimientos.
  • K, Potasio: Hortalizas de raíz. Umbelíferas como zanahorias o apios y Liliáceas como ajos o cebollas.
  • +N, Fijadoras de Nitrógeno: Hortalizas que aportan Nitrógeno al suelo. Leguminosas como habas o guisantes.

Si en tu caso lo que tienes son bancales grandes, puedes dividirlos en 4 secciones y hacer la rotación siguiendo esas secciones como si fueran bancales individuales.

Para finalizar, te recomendamos que veas nuestro video donde explicamos más detalladamente la rotación NPK

Si te ha gustado nuestro post te invitamos a que sigas nuestras redes sociales: Youtube, Instagram y Facebook para seguir aprendiendo todo lo necesario sobre los huertos urbanos y convertirte en un verdadero Huertumers.